Lo primero que tendrás que hacer será preparar todos los materiales que usarás. Es imprescindible que laves el coche, ayudándote de algún tipo de material que lubrique como pueda ser la siempre útil y efectiva agua, la cera en spray, o el propio jabón, ya que, de lo contrario, lo único que conseguirás será dañar la pintura y tener que pulir los arañazos.
Además, y aunque no lo parezca, hasta el hecho de limpiar el coche debería seguir un orden que es el siguiente. Lo primero que tendrás que limpiar serán las ruedas para luego seguir con pintura, el propio interior del coche y los cristales. Y es que, de lo contrario, lo más probable es que te toque lavar más de dos veces alguna parte, perdiendo tiempo y esfuerzo. La última parte serán los cristales, ya que así evitarás que se manchen mientras limpias el interior.
La parte de las ruedas necesitarán un tratamiento especial, ya que lo más normal es que tengan polvo procedente de los frenos, lo que podría acabar rallando la pintura, por lo que lo más recomendable es que reserves un cubo de manera exclusiva para esta parte del vehículo.
Además, si de verdad quieres limpiar el coche como es debido debes tener en cuenta que cada una de las partes tiene su propia herramienta idónea, por lo que en el caso de las ruedas serán unos cepillos redondos, en los cristales un simple trapo, etc. Así como productos que te permitirán limpiar el vehículo en seco, unas sustancias con las que bastará con ser aplicadas en paño o toalla de microfibra, preferentemente y pasarla por el coche, ya que se encargará de recoger la suciedad. Consejos útiles tanto si compráis uno de los coches de ocasión Honda en Barcelona como si se trata de uno nuevo.
